Clasificación:
Orden: Ceratodontiformes
Familia: Lepidosirenidae
Género: Lepidosiren
Especie: L. paradoxa
Distribución:
Centro de sudamérica. Principalmente en los ríos Amazonas, Paraguay (Paraguay) y Paraná, y sus afluentes. También se le puede encontrar en algunos ríos de Argentina y de las Guayanas.
Habita en aguas estancadas como charcas (las cuales muchas de ellas se secan en la época seca) con mucha vegetación.
Forma:
La típica de los peces pulmonados. Alargada, como si se tratara de una serpiente o de una anguila con unas escamas inapreciables ya que son muy pequeñas.
Posee unos pequeños ojos muy característicos en los peces pulmonados. Las aletas pectorales y pélvicas (dos a cada lado del pez) se asemejan a pequeños remos que le sirven como medio de locomoción en el fondo del río.
Coloración:
Desde gris hasta un marrón con manchas más oscuras distribuidas a lo largo de su cuerpo. La parte inferior suele ser más clara.
Tamaño:
Llega a medir hasta 1,25 metros y pesar cerca de los 20 kilos. En cautividad lo normal es que no llegue a esas tallas y sea algo más pequeño
Dimorfismo sexual:
Al igual que en otras especies de peces pulmonados, no hay diferencias apreciables a simple vista.
Esperanza de vida:
En torno a 8 años. Algunas fuentes refieren que pueden llegar a vivir más, hasta 20 años.
Parámetros del agua:
PH: 6.5-7.0 (óptimo). Pueden soportar PH más alto, de hasta 8
GH = 5-20
Temperatura: 24-28ºC (ideal), aunque pueden soportar temperaturas mayores o menores.
Acuario:
Para este tipo de peces, cuanto más grande, mejor. Dado el gran tamaño que alcanzan, estamos hablando de acuarios enormes de cerca de miles de litros por ejemplar, aunque sea una especie no muy exigente y que puede adaptarse a bajos niveles de oxígeno en agua gracias a su sistema respiratorio.
Deberemos proporcionarle escondites en forma de raíces y piedras, evitando aristas y puntas afiladas que puedan dañar al pez.
En esta especie, al igual que en el resto de peces pulmonados, se hace necesaria una muy buena filtración.
Es un gran escapista, por lo que deberemos tener el acuario tapado, pero siempre dejando un espacio de aire entre tapa y columna de agua, para que el pez pueda asomarse a respirar.
El sustrato si es arenoso, mejor, y la luz, si es tenue, mejor.
Alimentación:
Omnívoro.
Su alimentación será similar a la de otros peces pulmonados.
En libertad es un depredador paciente que espera a que la víctima se le aproxime. También se puede alimentar de plantas.
En cautividad, de vez en cuando le podemos dar alimento vivo como insectos (que no contengan pesticidas) u otros invertebrados. También podemos intentar proporcionarles alimento congelado en forma de larvas de diversos invertebrados (mosquito, tubifex...); krill, trozos de gamba o mejillón... También le podemos dar trozos de pescado sin espinas.
Los ejemplares adultos serán alimentados pocas veces a la semana, algunas fuentes dicen que es preferible alimentarlos una sola vez a la semana. En cambio, los alevines serán alimentados a diario.
Comportamiento:
Al igual que sus primos africanos es un pez nocturno, que se ocultará durante el día y que comenzará su actividad al anochecer. Es un depredador, por lo que conviene mantenerlo solo en un acuario específico para esta especie.